Cardioprotección comunidad de vecino
En España cada 20 minutos se produce una parada cardiorrespiratoria y el 75% tiene lugar en el hogar, según datos de la Federación Española del Corazón. «Si se aplica un desfibrilador en los 3 minutos después del paro cardiaco, la supervivencia aumenta un 73% y si se utiliza en menos de 5 minutos, las posibilidades se incrementan hasta el 50%», actualmente solo se salva el 5% de los fallecimientos por parada cardiorrespiratoria en España.
Con un equipo desfibrilador se podrían reducir en las comunidades de propietarios el número de muertes por parada cardiaca, una de las principales causas de mortalidad en nuestro país.
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PROYECTO
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FORMACIÓN
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¿Cómo puede ayudar un desfibrilador DESA en una comunidad de vecino?
En una comunidad de vecinos, los desfibriladores DESA ofrecen una solución inmediata ante una parada cardíaca, una de las principales causas de muerte súbita. Estas situaciones pueden ocurrir en cualquier momento, especialmente entre personas mayores o con patologías previas, por lo que contar con un DESA en zonas comunes (como portales o garajes) puede marcar la diferencia mientras llegan los servicios de emergencia.
El DESA está diseñado para ser usado por personas no expertas, con una sencilla guía por voz y pasos automáticos que indican cuándo y cómo actuar. Con una formación básica, cualquier miembro del personal del centro puede intervenir eficazmente, convirtiendo un entorno comercial en un espacio cardioprotegido y preparado para salvar vidas.
Además de alinearse con las normativas vigentes en materia de cardioprotección en espacios públicos, la presencia de un DESA refuerza la imagen del centro como un lugar seguro, comprometido con el bienestar de todos sus visitantes. Es una medida que no solo protege, sino que también genera confianza y valor social.